Escrito por Fabiola Aceves
El síndrome de impostor o el fenómeno del impostor es cuando una persona no se siente merecido de todo lo que ha logrado. Es algo muy común pero no platicado en muchos estudiantes de la universidad. En un esfuerzo para ayudar a combatir este estigma, el Centro de Educación Superior César E. Chávez condujo un taller el 12 de septiembre.
El taller fue conducido por María Gisela, que trabaja con CAPS. CAPS es el centro de asesoramiento y servicio psicológicos, estudiantes pueden ir al edificio 66 donde está la librería bronco, si necesitan de los recursos.
El taller ayudó a los participantes aprender sobre el síndrome de impostor y los factores que contribuyen a eso. Los participantes tuvieron la oportunidad de habla de sus experiencias con el síndrome de impostor.
Yaritza González, estudiante de estudios de la industria de música explicó su experiencia cuando cambió su carrera de física a los estudios de la industria de música.
“De repente cambié a algo que era fuera de mi zona de confort y en mi cabeza sentí que todos alrededor de mi fueron entrenados clásicamente cuando en realidad eso no era el caso”.
El taller explicó que uno de los factores que contribuye al síndrome del impostor fue la comparación. En la cultura hispana, la comparación entre miembros de familia es algo muy común. Muchas veces los familiares hacen comparación entre los primos, los hermanos y los amigos. Esto afecta como alguien se pueda sentir sobre sus logros.
Estudiante de ingeniería civil, Andrés Nuño platicó su experiencia como el hermano más joven y la presión en tener éxito en la universidad.
“Cuando saque una calificación de la letra C, mis hermanos me decían que, si ahora era estudiante que sacaba Cs porque la calificación más baja que ellos sacaron fue una B”, dijo Nuño. “Escuchando ese mensaje constantemente hizo cosas difíciles para mí”.
Hay muchos factores que contribuyen al síndrome del impostor y se puede sentir difícil para combatirlos, el aislamiento puede ser considerado el mayor factor. El aislamiento refuerza la idea porque al alejarte de tus compañeros y familiares pierdes tu sistema de apoyo en combatir este fenómeno.
Vanessa Maldonado, estudiante de planeación urbana y regional con enfoque en sostenibilidad, platico de las cosas que le ayudan a combatir el presentimiento del síndrome del impostor.
“Yo empiezo a pensar que soy igual de inteligente que todos aquí” dijo Maldonado. “Aunque tú mismo pienses que no mereces está aquí con todos, te tienes que decir que si lo mereces todos los días hasta que se haga un pensamiento de instinto”.
Un estudio hecho por PewResearch.org encontro que en los últimos años, el porcentaje de Hispanos inscrito en las universidades ha incrementado de 1.5 millones en el año 2000 a 3.8 millones en el año 2019. Aunque se ha visto este incremento, un artículo escrito en BostonGlobe.com dice que los Hispanos son subrepresentados en la educación superior. El 4% de personas que tienen una maestría son latinos y solo el 1% de personas con un doctorado son latinos.
El síndrome de impostor puede ser más común entre estudiantes de la universidad de primera generación por la presión que nosotros mismos nos ponemos. Como estudiantes de primera generación sentimos una presión de tratar de ser lo mejor que podemos para que haya válido la pena el sacrificio de nuestros padres.
Para tratar de romper este ciclo, el taller hablo de cinco recomendaciones que alguien puede hacer. Es ser amable contigo mismo, celebrar todos tus logros, crear un sistema de apoyo, reconocer tu valor y cambiar el narrativo y visualizar el éxito.
Para obtener más información sobre futuro eventos pueden seguir al Centro de Educación Superior César E. Chávez en su página de Instagram que es @cpp_cecche.
Foto cortesía de Fabiola Aceves